20 de noviembre de 2016

Reunion a las 9:30

Después de dos días de preparativos, y una vez que los jefes supremos han comprado la idea de Nando, hoy por fin llego el momento del ensayo general con toda la manada junta antes de la presentación por todo lo alto al día siguiente. Ya pasaron meses del nacimiento de la idea de crear un espectáculo fuera de lo normal, idea loca que vendió diciendo que seria lo nunca visto. Nando ya estaba en el centro de la jaula cuando entro el primer animal, un Golden Retriever muy bien cepillado y con pasos elegantes como no podía ser de otra forma. La siguiente en entrar en escena fue una Mucuchie con un andar mezcla entre asustadizo y exótico, se colocó en su sitio mientras observaba al Golden que seguía dando vueltas a la jaula sin encontrar un sitio que le gustara. El tercero entro con paso firme y mirada desafiante y fría, era uno de esos Husky Siberiano que todos querríamos tener cerca cuando surge un problema, se sentó sin decir ni guau. Con el siguiente llego el relax, con paso discreto pero serio llego un Pastor Alemán, por su cara podríamos decir que la edad y la vida lo habían convertido en un poco cascarrabias, se colocó en el mismo sintió de siempre y suspiro como resignado. Dicen que no hay quinto malo, pero se dicen tantas cosas que ya no se sabe que creer, después de unos minutos de espera entra una Caniche impecablemente peinada, el circulo esta casi completo. Por ultimo entra en la jaula un Rottweiler, muchos le tienen miedo pero una vez que lo conoces te das cuenta que en realidad es un Yorkshire con armadura. Fuera quedan dos suplentes preparados para actuar en caso necesario, una nerviosa Cocker, y una tranquila San Bernardo, por cierto, el Golden se acaba de colocar por fin en su sitio. Todo esta listo, que comience el espectáculo, por primera vez en la historia una banda de caninos de diferentes razas demostrara que son capaces de hacer algo mas que jugar con una pelota. La gran idea de Nando es que uno a uno, e incluso en parejas, atraviesen un aro en llamas. Al principio esto parecía fácil, pero ahora Nando estando ya con todos justos, no lo ve claro, y tenia razón, pronto empezaron las quejas y protestas de todos a la vez. Cosas como: ¿por que no un cuadrado?, ¿Qué necesidad de hacer eso?, ¿por que no lo pruebas tu antes?, "yo lo que diga la mayoría, si dicen lo mismo que yo, claro", "yo prefiero al revés, que el aro venga a mi si tiene huevos", y así podríamos estar un par de horas. Para terminar la discusión con la jauría Nando a anunciado que al día siguiente habrá un espectáculo pero con gatos.



9 de noviembre de 2016

Y ahora ¿que?

Cualquier otro día ese camino se le habría echo corto, pero esa tarde fue como si entre el punto A y el B hubiesen puesto el resto de las letras del abecedario, pero en el fondo lo agradeció, así tendría mas tiempo para recordar como había llegado a ese día. Ya hacían mas de 10 años que había comenzado su aventura con la música, primero los primeros acordes y con el tiempo canciones ya enteras, nada fuera de lo simple, alguna de Sabina, del maestro Serrat, y por supuesto algún clásico de los 80 que eran lo que mejor encajaba su publico en aquel parque. Con el tiempo fue comprobando que las Españolas llamaban mas a las monedas de 20 céntimos, y las extranjeras a la de 10, 5, y céntimos sueltos, pero aun así alguna, aunque de poca recaudación, nunca falto en las tardes de frio: "Hero" de Family Of The Year, esta canción siempre le levantaba el animo, aunque no la cartera. Y así fueron pasando los días, los meses y los años, y después de tantas tardes dándole la lata a transeúntes y a niños mientras jugaban al balón, hoy, sin saber aun como, presentaba su primer disco en sociedad, disco con 10 canciones suyas, canciones que fue metiéndoselas a su publico entre Clapton y Zeppelin. Una vez en el local pudo saludar familia, amigos, y a gente que hacia mucho tiempo que no veía, dio una pequeña charla, toco un par de temas y dio las gracias, sobre todo a esos niños que hoy ya son mayores de edad, y que no es por nada, pero crecieron escuchando muy buena música mientras jugaban al balón. Llego el momento de la despedida y uno de los invitados le hizo un comentario y una pregunta: "y ahora ¿que?", pues ahora, contesto, me voy corriendo a la plaza que en un rato le toca a los Pink Floyd.


Gracias a todos por estar ahí.